Se acerca un nuevo 21 de noviembre donde Argentina celebra el “Día de la Enfermería”.
La conmemoración se relaciona con la festividad de la Virgen de los Remedios. Aunque a partir del año pasado (21/11/18) esta fecha toma un tinte especial porque fue el día en que la Enfermería se puso de pie, realizando una masiva y contundente marcha. La movilización fue motivada por la promulgación de la Ley de Carrera de Profesionales de Salud 6035/18 que insistió en dejar afuera a todo nuestro colectivo profesional.
Hace años la Enfermería en Argentina y en el Mundo, viene dando la peleapor obtener el reconocimiento que merece. De hecho, la Asociación de Licenciados de Enfermería (ALE) se constituyó hace más de 17 años con la misión de actuar en defensa de los derechos profesionales, sociales y económicos de la enfermería y tiene como meta primordial la incorporación a la Carrera de Profesionales de la Salud del GCBA. Por eso participó en la presentación de varios proyectos de ley en la Legislatura Porteña como: el proyecto presentado junto a Alejandro Bodart en 2012, trabajado con perspectiva de genero por la Lic. Gloria galdamez y la Lic. Berta Leyton durante el año 2011, desde el parlamento de la mujer y que tuvo tratamiento en Comisión de Salud. También se trabajo en la formulación de iniciativas populares y en la lucha por la derogación del decreto 260/12, entre otras actividades y movilizaciones.
El 1 de noviembre de 2018 cuando se dio tratamiento y aprobó de manera express la ley 6035/18 (amparados por la mayoría legislativa y por los gremios mayoritarios que negociaron a espaldas de sus trabajadores), nos encontraron en la puerta de la Legislatura porteña, junto a otras organizaciones. Pero a medida que pasaban los días, las enfermeras y enfermeros de CABA y de toda la Argentina, se iban interiorizando. Comenzaban a participar, motivados por la indignación frente a la exclusión injustificada.
Fue así como se gestó el 21N, fruto de Asambleas en los lugares de trabajo, grupos autoconvocados en redes sociales y participación en las distintas asociaciones profesionales y/o sindicales.
Fue tal el movimiento que el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires inició el diálogo. Lejos de ser ventajoso, utilizaron el mismo para generar rupturas hacia el interior; esta maniobra sirvió para evadir el reclamo. También en consecuencia tuvieron que hacer cambios en la Nueva Carrera Administrativa en la que habían agrupado a todas las enfermeras y enfermeros, realizando algunos ajustes como el acceso a las licencias de descanso profesional (estrés), que el resto de profesionales de la salud tiene, pero nos era negado.
Actualmente hay apoyo, además de otras jurisdicciones dentro del territorio nacional (en las que las y los profesionales de enfermería están dentro de las carreras de profesionales de salud), también en un contexto internacional favorable.
CONTEXTO GLOBAL DE LA ENFERMERIA:
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado al 2020 como “El Año de la Enfermería” en apoyo al reconocimiento y jerarquización de las enfermeras y los enfermeros. Ha visitado recientemente nuestro país, la Dra. Annette Kennedy, presidenta del Consejo Internacional de Enfermeras (CIE), que junto a la FAE, AECAF, ALE y otras organizaciones se dirigieron al Ministerio de Salud para debatir temas vitales que afectan a la profesión.
Por otra parte, el movimiento feminista que está llevando adelante múltiples cambios a nivel global, pero que además tiene una fuerte participación popular en nuestro país, nos ofrece herramientas técnico-académicas para analizar la precarización laboral de la enfermería en relación a la discriminación de género en la que se sustenta. No es casual que las profesiones históricamente feminizadas sean las más precarizadas y en el caso de profesiones de salud no se puede negar que la postergación que sufrimos está fuertemente abalada por el ‘modelo médico hegemónico’
VISTA DESDE LA PERSPECTIVA DE GENERO:
Las Enfermeras debemos observar nuestra actividad con perspectiva de género. Además el movimiento de mujeres puede y debe apoyar la lucha de las enfermeras, que en su mayoría son: mujeres trabajadoras con una brecha salarial enorme frente al resto de profesionales de salud (con títulos equivalentes), que además de tener doble o triple jornada laboral se les suma el dedicarse a tareas de cuidado (con el deficiente o nulo reconocimiento salarial que ello implica), que sufren las violencias y vulneraciones propias de las mujeres en los ámbitos laborales (techo de cristal a nivel laboral y sindical, etc).
Ahora se acerca un nuevo 21N, otra oportunidad para volver a encontrarnos en las calles, organizarnos, luchar por nuestro reconocimiento profesional y por nuestros salarios, contra el ajuste en salud. Ya hemos visto que al reclamo legal lo debe acompañar la movilización y que con participación vamos logrando reivindicaciones que nos eran negadas desde hace mucho tiempo.
¡Por eso te invitamos a acercarte a la ALE, contáctate por nuestras redes para salir juntas y juntos a luchar por el reconocimiento profesional y salarial!
Lic. Prof. Carolina Cáceres
Buenos Aires 08 de Noviembre de 2019
4 Comments
Es primordial el compromiso de las nuevas generaciones de Enfermeria y esta visto q esta gestandose.Adelante con el mitico 21 n2
Excelente profesional! Orgullosos de que se hay sumado. Así es esperamos se sumen otras colegas. Hay mucho potencial en el Colectivo. Se viene la nueva generación de profesionales… Gracias por el contacto.Saludos!!
así es . Compromiso y participación(en todos los contextos), aporta al desarrollo y crecimiento de Enfermería. por lo tanto. No seremos reconocidos en la sociedad ni en el mismo sistema de salud
Excelente nota de la Lic. Prof. Carolina Caseres. Muy importante la resignificación del 21 N como día en que la Enfermería argentina salió a las calles protagonizando con fuerza el reclamo de ser reconocidos y reconocidas como Profesionales. El contexto internacional y regional enriquece la visión histórica